Maratón de Ingmar Bergman Parte 3
Fresas Silvestres
(Dirigido por Ingmar Bergman – Suecia 1957)
Nuestra relación con las personas consiste en discutir con ellas y criticarlas.
El médico y profesor Eberhard Isak Borg (Victor Sjostrom) tiene 78 años de edad. Esta por recibir un Título Honorario en la ciudad de Lund. Decide que en vez de tomar un avión, va hacer el viaje en su auto. Su nuera Marianne (Ingrid Thulin) le dice que quiere acompañarlo en el viaje. Su empleada particular prefiere volar en avión.
La noche previa al viaje tiene un sueño que parece pesadilla, en el sueño el tiempo ha desaparecido (los relojes no tienen ni minutero ni segundero), la ciudad que ve en el sueño esta vacía, y por último cuando pasa un camión que bota al piso un ataúd, una mano sale como queriendo escapar. Isak se acerca a mirar quien es el muerto y se da con su propio rostro, es él mismo.
Al otro día durante el camino hacia Lund, Marianne le dice todos sus defectos a Isak. No parece una buena idea hacerle eso a un hombre que esta por ser premiado pero Marianne necesita desahogarse, Isak la escucha. Como de cuando en cuando intercambian el puesto de chofer, cuando le toca a Marianne, Isak da una cabeceadita y duerme, mientras esta dormido recuerda todo su pasado a manera de sueños. Pareciera que el viaje le sirviera a Isak para darse cuenta de las cosas buenas que hizo en la vida, de las malas, de sus defectos, de sus virtudes, de que todavía puede hacer algo para ayudar a su nuera Marianne que le acaba de revelar un gran secreto.
Las películas de Bergman son más para verlas, disfrutarlas y pensar. Véala, disfrútela y piense.
Frase de unos muchachos para Isak, por su Título Honorario: Supimos que hoy es un día especial, y le queremos dar estas flores. Estamos impresionados que usted sea médico desde hace 50 años. Sabemos que eres muy inteligente, que conoces todo de la vida y que siempre fuiste muy dedicado.
(Dirigido por Ingmar Bergman – Suecia 1957)
Nuestra relación con las personas consiste en discutir con ellas y criticarlas.
El médico y profesor Eberhard Isak Borg (Victor Sjostrom) tiene 78 años de edad. Esta por recibir un Título Honorario en la ciudad de Lund. Decide que en vez de tomar un avión, va hacer el viaje en su auto. Su nuera Marianne (Ingrid Thulin) le dice que quiere acompañarlo en el viaje. Su empleada particular prefiere volar en avión.
La noche previa al viaje tiene un sueño que parece pesadilla, en el sueño el tiempo ha desaparecido (los relojes no tienen ni minutero ni segundero), la ciudad que ve en el sueño esta vacía, y por último cuando pasa un camión que bota al piso un ataúd, una mano sale como queriendo escapar. Isak se acerca a mirar quien es el muerto y se da con su propio rostro, es él mismo.
Al otro día durante el camino hacia Lund, Marianne le dice todos sus defectos a Isak. No parece una buena idea hacerle eso a un hombre que esta por ser premiado pero Marianne necesita desahogarse, Isak la escucha. Como de cuando en cuando intercambian el puesto de chofer, cuando le toca a Marianne, Isak da una cabeceadita y duerme, mientras esta dormido recuerda todo su pasado a manera de sueños. Pareciera que el viaje le sirviera a Isak para darse cuenta de las cosas buenas que hizo en la vida, de las malas, de sus defectos, de sus virtudes, de que todavía puede hacer algo para ayudar a su nuera Marianne que le acaba de revelar un gran secreto.
Las películas de Bergman son más para verlas, disfrutarlas y pensar. Véala, disfrútela y piense.
Frase de unos muchachos para Isak, por su Título Honorario: Supimos que hoy es un día especial, y le queremos dar estas flores. Estamos impresionados que usted sea médico desde hace 50 años. Sabemos que eres muy inteligente, que conoces todo de la vida y que siempre fuiste muy dedicado.
Comentarios
Previamente me gustaría indicarte que me ha encantado encontrar un buen blog de cine, sinceramente me ha sorprendido.
Volviendo a " Fresas salvajes " , hay una parte de la película, en un sueño del protagonista en el que le somenten a un juicio injusto, y el encausado pregunta por el veredicto. Alguien le dice:
- Culpable
El protagonista pregunta:
- ¿ Culpable de qué ?
Le responden:
- Culpable de culpabilidad.
Pregunta:
- ¿ Y cuál es la pena ?
Respuesta:
- la soledad.
Lo he escrito de memoria y hace años que la ví, pero la retengo como si la hubiera visionado ayer.
Enhorabuena por tu blog. Excelente, volveré.